El Gobierno chileno asegura que el Silala es un río internacional y no un manantial como lo indica Bolivia.
La presidente de Chile, Michelle Bachelet, informó este lunes que su país demandará a Bolivia ante la Corte Internacional de Justicia de la Haya por el uso de las aguas del río Silala.
«Ellos insisten en que son aguas de un manantial, nosotros que es un río internacional. La demanda es para pedir que la Corte se pronuncie sobre si es un río internacional como decimos nosotros», dijo durante una entrevista con Radio Zero.
Asimismo, detalló que el canciller chileno, Heraldo Muñoz, informará a Bolivia que han decidido denunciarle ante La Haya.
En un comunicado emitido por la cancillería de Chile se detalla que la denuncia obedece a las siguientes razones:
a) La existencia de una controversia originada en la afirmación de Bolivia que el Río Silala no es un curso de agua transfronterizo y que, en consecuencia ese país tendría derecho al uso del 100 por ciento de sus aguas.
b) El anuncio público del Presidente Evo Morales que Bolivia presentaría una demanda contra Chile ante la Corte Internacional de Justicia por esta disputa, acusando al Estado de Chile de actuar ilícitamente y de estar “robando” las aguas del Río Silala.
c) La posterior creación en Bolivia de una Dirección Estratégica para desarrollar este nuevo litigio con Chile.
d) Los múltiples y serios esfuerzos que ha hecho Chile para resolver amistosamente la diferencia, todos los cuales se han visto frustrados por la insistencia de Bolivia en negar los derechos de Chile.
e) El deber de Chile de proteger sus recursos naturales, dando certeza jurídica a las titularidades que le reconoce el derecho internacional.
«Dichas expresiones del gobierno de Bolivia han obligado a Chile a actuar en defensa de sus derechos, los que están siendo impugnados de manera hostil», prosigue el texto.
Bolivia anunció el pasado 26 de marzo que presentaría una demanda contra Chile ante La Haya por el uso abusivo de las aguas del río, que según el gobierno de la nación andina, han sido desviadas de forma artificial.
Bolivia reclama su soberanía sobre el manantial del Silala, una fuente de agua que se origina en el Departamento de Potosí, en el sureste de Bolivia, a cuatro kilómetros de la frontera con Chile, país que canalizó artificialmente (desde 1908) el curso del agua para abastecer a sus ciudades del norte.
El Gobierno boliviano asegura que unos 180 litros de agua por segundo fluyen por un sistema artificial de acueductos hacia Chile, que la aprovecha para su uso en Chuquicamata, la mina de cobre a cielo abierto más grande del mundo. Por el uso de este recurso hídrico, Chile no le otorga ninguna bonificación a Bolivia, un hecho que éste cataloga de «ilegal y abusivo».
En contexto
En abril de 2009 Bolivia y Chile llegan a un preacuerdo, en virtud del cual Santiago se comprometió a pagar por el uso del 50 por ciento de las aguas del manantial, mientras se realizaba un estudio hidrológico profundo.
El convenio entre ambas naciones nunca se cumplió y fue descartado en 2010 cuando Chile decidió interrumpir las negociaciones de una agenda de 13 puntos sobre problemas pendientes, donde se incluían los recursos hídricos compartidos
La presidenta de Chile informó el pasado mes de marzo que contrademandará a Bolivia si este país concreta su demanda en la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya por el caso del uso de las aguas del Silala.
Por su parte, el canciller chileno, Heraldo Muñoz, señaló, tras conocer la segunda demanda de Morales ante La Haya en contra de Chile, pero esta vez por el río del Silala: «Quiero decirlo de forma clara, no importa cuántas demandas Bolivia interponga en los tribunales (…) no se cederá soberanía, que se entienda bien».