El abogado constitucionalista remarcó que “el desfase en el valor del peso respecto a la moneda estadounidense lo produjo el Gobierno de Mauricio Macri”, y además apuntó a la Sala II de la Cámara Federal: “Se le caen las dos bibliotecas con ese esperpento que fue decidir que Bonadío siga al frente de la causa”.
Eduardo Barcesat opinó que este procesamiento “es ficcional, es decir que no se corresponde con ninguna realidad presente, anterior o futura. El dominio del hecho, es decir, haber producido el desfase en el valor de cambio respecto a la moneda estadounidense, lo hizo el Gobierno de Mauricio Macri. No devaluar fue un compromiso de los candidatos, de hecho Macri le dijo a Scioli que deje de mentir cuando mencionaba esto”.
“Ahora se ha descubierto que los principales beneficiarios de este ajuste violento del valor dólar han sido personajes del entorno del Gobierno”, agregó el letrado. “Son ellos los que urdieron las maniobras para obtener un beneficio absurdo, abultado, en un plazo brevísimo. Son los que recién ahora están siendo investigados a partir del trabajo del fiscal Jorge Di Lello”.
Incluso, recordó, “también está imputado el propio juez Claudio Bonadío, porque cuando el Presidente del Banco Central le preguntó `¿Qué hago con los vencimientos del dólar futuro, los pago o no?´, Bonadío dijo `paguen, no hay ninguna medida restrictiva´. Entonces no conoce el Artículo 23 del Código Penal que dice que cuando un delito está ocurriendo debe impedirse”.
La Sala II de la Cámara Federal, integrada por Martín Irurzun, Horacio Cattani y Carlos Farah, confirmó al juez federal Claudio Bonadío en la causa tras los pedidos de recusación. Barcesat criticó la decisión y aseguró que “en este caso no hay biblioteca de izquierda y de derecha diciendo dos cosas. A la Sala II de la Cámara Federal se le caen las dos bibliotecas con ese esperpento jurídico que fue resolver que siga Bonadío. Una resolución absurda y contraria a los tratados internacionales. Hay que recusar también a estos camaristas que han perdido el norte y tirado por la borda 30 o más años de prestigio”.
“Esto es grosero, espero que en un plazo no mayor a 60 días el proceso sea anulado, como corresponde. Y que los antecedentes tanto de Bonadío como de los jueces de la Sala II sean remitidos al Consejo de la Magistratura, porque se está obrando contrario a derecho”, cerró el abogado constitucionalista.