San Luis (LaNoticia) 22-03-16. La decisión del abogado fue sorpresiva y deja una sensación de abandono de defensa. ¿No es mala praxis?
La intervención de Rafael Berruezo en el expediente que investiga el asesinato de Romina Aguilar, por el cual están procesados y con prisión preventiva su viudo Diego Lorenzetti y el brasilero De Oliveira, vino mal barajada de comienzo y ahora tuvo su `frutillita del postre´ con la renuncia a la defensa de Lorenzetti.
Uno de los primeros errores cometidos por Berruezo fue no haberse constituido en parte del expediente en la indagatoria de De Oliveira, y no participar de la misma, con lo cual no pudo hacer preguntas o evitar que esa indagatoria fuera dirigida exclusivamente para imputar a su defendido, como él mismo dijo a la prensa que había sido el motivo de la entrega del brasilero a la justicia. No controló la principal prueba que había contra su defendido.
Para colmo renuncia en un momento clave para Lorenzetti, que es cuando hay un recurso de apelación a la prisión preventiva del viudo de Aguilar en la Cámara que, por el momento, deja fuera de jurisdicción al Juzgado de Instrucción interviniente, en el mismo momento en que apareció el taxista dando otra versión de los hechos.
Precisamente, mientras ese recurso no sea resuelto por la Cámara, el Juzgado no puede intervenir en la denuncia del taxista que sostuvo que el brasilero y el “Bocón” Vilchez le aseguraron que el ex senador de La Calera, Alberto Leyes, les había pagado por el crimen y que le debían echar la culpa a Lorenzetti. Entonces no se entiende cómo la defensa de Lorenzetti no ha desistido de ese recurso, así se puede incorporar la denuncia del taxista y de eso modo tratar de dar vuelta lo hecho hasta el momento en la investigación, porque si esperan que la Cámara se pronuncie, y si lo hace consolidando lo actuado por Virginia Palacio Gonela hasta ahora, estarían prácticamente perdidos.
Por otra parte, si la defensa no desiste del recurso planteado ante la Cámara, veremos cuánto de política hay en las decisiones judiciales, puesto que habitualmente, este tipo de recursos lleva varios meses para resolverse. En el caso de Lorenzetti, el mismo se interpuso el miércoles de la semana pasada, será tiempo de contar cuántos días, semanas o meses pasan hasta su resolución, para saber si hay “Alcoyana-Alcoyana” en la misma.
Carlos Rubén Capella
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