Ingresó al hospital consciente y alcanzó a decir a los médicos que ella misma se había rociado con alcohol y prendido fuego con un fósforo «por conflictos» con su familia.
La Justicia pidió informes sobre posible violencia de género.
El miércoles, cerca de las 21:20, una mujer de unos 40 años, ingresó a la guardia del Hospital Zonal con quemaduras de 2º y 3º grado en más del 30 por ciento de su cuerpo. Por la gravedad de la situación y lo dudoso del caso, personal del nosocomio dio participación a la policía, que tomó intervención con conocimiento de la Fiscalía de esta ciudad.
Trascendió que lo poco que pudo manifestar la mujer, previo a su derivación a la ciudad capital, es que ella se habría rociado con alcohol y prendió un fósforo, aduciendo problemas con su familia. Al momento del hecho, en el domicilio se encontraba el marido de la mujer, quien la trasladó a la guardia del hospital. El hombre habría dejado entrever que su mujer se encerró en una habitación y que él escuchó los gritos y cuando ingresó se encontró con el terrible panorama.
Tras quitarle la ropa que se le había incendiado procedió a trasladarla hacia el hospital.
La fiscal María Cecilia Rímini ordenó una minuciosa investigación en torno al caso.
Se tomarían testimonios a los allegados a la mujer, que habría confiado al personal policial, tener problemas con su marido y otro familiar, por eso habría tomado esa determinación.