El titular de la Federación Argentina Sindical del Petróleo, Gas y Biocombustibles, Alberto Roberti, sostuvo que habrá problemas en el suministro domiciliario de gas «en los grandes bolsones urbanos, como Buenos Aires, Rosario, Córdoba o Santa Fe» por la huelga que mantienen en reclamo de un aumento salarial. Roberti confió en que haya una propuesta económica satisfactoria «para terminar» con la medida de fuerza.
«Como no se puede stockear el gas, en el segundo día de la medida de fuerza hay problemas en la llegada del suministro a los distintos lugares. Especialmente a las redes domiciliarias o a los lugares donde la gente va a buscar a los puntos de venta, porque no hay trabajadores», explicó el sindicalista y diputado por el Frente Renovador.
Los trabajadores del sector gasífero lanzaron el martes un paro general a nivel nacional en reclamo de un aumento salarial del 32 por ciento y la aplicación del convenio colectivo de trabajo.
El sindicalista, en declaraciones a radio América, advirtió que los problemas se sentirán con más fuerza «en los grandes bolsones urbanos, como Buenos Aires, Rosario, Córdoba o Santa Fe», y advirtió que todavía no recibieron una propuesta de aumento concreta por parte de las empresas.
«Han unificado un criterio para tratar de actuar en común, pero todavía no tenían definida una propuestas. Y lo que me parece es que han tenido alguna directiva del Gobierno para que activen la marcha, pero no han propuesto todavía ningún número», expresó.
Además, Roberti negó que los trabajadores sean los responsables por las dificultades que existan en la distribución de gas, y acusó a las empresas de «tener una enorme rentabilidad» y no querer «rediscutir con la gente esas ganancias en términos salariales».