Susana Malcorra, ex canciller de Mauricio Macri, se diferenció del gobierno nacional y aseguró que «objetivamente» se puede hablar de «un golpe de Estado» contra Evo Morales en Bolivia.
«En mi opinión, sí se puede considerar como un golpe de Estado», sostuvo la ex ministra de Relaciones Exteriores y Culto respecto a la situación en el vecino país. Consideró que para llegar a esa conclusión debe tenerse en cuenta que fue interrumpido el mandato de un presidente democráticamente electo, que el procedimiento no fue el establecido constitucionalmente y que las Fuerzas Armadas tuvieron un rol importante en el desenlace.
«Que se diera en un contexto muy complejo, y donde hay cuestiones que se pueden poner sobre la mesa como motores que llevaron a la expresión de la gente en las calles, no quita que objetivamente se pueda hablar un golpe de Estado», precisó la ex funcionaria, marcando un claro contraste con la posición de Macri y su gobierno, claramente alineados con la posición de los Estados Unidos en su negativa a reconocer la ruptura del orden constitucional en Bolivia.
Al evaluar las diferentes posiciones manifestadas por políticos y funcionarios argentinos sobre el caso, Malcorra señaló que «hay una influencia de lectura político-ideológica».
En cuanto a la posible solución del conflicto, la ex canciller aseguró que «en la región podría generarse un espacio para tender puentes, pero el problema es que la región están muy fracturada y dividida por cortes ideológicos. Hay que encontrar un grupo de gente que sea respetada y que sean capaces de generar diálogo. Lo más preocupante — concluyó– es que las calles de Bolivia están estallando, y no hay nada bueno detrás de eso.»