El representante permanente de Cuba ante las Naciones Unidas en Ginebra (Suiza), Pedro Luis Pedroso, denunció este lunes el empeño de Estados Unidos (EE.UU.) en obstaculizar las relaciones comerciales de la isla, durante una reunión de jefes de Delegaciones de la Organización Mundial del Comercio (OMC).
“En el último año, la actual administración ha incrementado significativamente sus medidas de cerco comercial y financiero contra mi país. Ha impuesto medidas adicionales para obstaculizar el comercio exterior e incrementado la persecución de nuestras relaciones bancario-financieras con el resto del mundo”, declaró el diplomático.
Esta política de Washington forma parte del bloqueo económico, comercial y financiero impuesto ilegalmante desde hace casi 60 años, que se ha recrudecido con el presidente Donald Trump.
El embajador mencionó como ejemplo de estas acciones punitivas la plena activación del título III de la Ley Helms-Burton de 1996, denunciando que la OMC permite el inicio de reclamaciones ante cortes judiciales estadounidenses contra inversionistas de terceros países que invierten en Cuba.
“Ello es totalmente ilegal y contraviene las normas más elementales del derecho y el comercio internacionales”, enfatizó el funcionario, quien consideró que la Ley Helms Burton no solo constituye un instrumento de guerra económica y coerción política, sino que pretende dictar a terceros países, una violación del derecho internacional.
Pedroso afirmó, citando la última evaluación del Fondo Monetario Internacional, que el escenario imperante ha pasado de la incertidumbre a la paralización del crecimiento del comercio mundial y a la desaceleración económica en casi el 90 por ciento del mundo.
El diplomático alertó que, si bien la situación es negativa para todos los países, las pequeñas economías y los Estados insulares en desarrollo son quienes más sufren el cambio climático y las turbulencias económicas mundiales; además, instó a defender el multilateralismo, apostar por la transparencia y la inclusividad, y tomar decisiones por consenso.
En septiembre pasado, Pedroso rechazó la política injerencista e intervencionista promovida por EE.UU. contra la soberanía, la libre determinación, la independencia e integridad territorial y ponderó la solución de conflictos por vías diplomáticas.