San Luis (LaNoticia) 25-10-18. En la tercera jornada del debate oral, ya quedó sumamente demostrado que los magistrados renunciaron sin fecha y antes de asumir. Ahora resta probar si hubo coacción.
En la audiencia de ayer se desistieron de varios testigos, mientras que el ex chofer del tensito de Raúl Laborda, luego ultrarodriguezsaísta y hoy poggista, Federico Tula Barale presentó una nota pidiendo que no se lo llamara a declarar, temiendo quedar como testigo falso, pero se podría haber ahorrado el trámite puesto que por pedido de Fiscalía y acuerdo con las partes, se desistió de su testimonio, y de Gloria Velázquez, Mónica Corvalán, Arturo Masjuan y Verónica Alonso.
Los testigos que dieron su relato ayer dejaron en claro que allá a finales de 2004 firmaron con la fecha en blanco sus renuncias a los cargos judiciales para los que habían sido elegidos. Pero cada uno de ellos, se cuidó extremadamente para no dejar `pegados´ a los imputados Sergio Freixes y Mario Zavala.
El primero en brindar testimonio fue Néstor Spagnuolo habló más como un militante político del rodriguezsaísmo que como un juez que firmó su renuncia antes de asumir, más allá que lo negó tajantemente.
El hombre que, según el testimonio de la denunciante Marina Ziliotto, veía gente que lo seguía y pensaba que desde el Gobierno ponía antenas cerca de su casa para espiarlo, dejó en claro su filiación al rodriguezsaísmo, puesto que todo cargo que ocupó y hoy ocupa, tienen que ver con asesorías legislativas en el oficialismo. Spagnuolo hizo toda una película sobre que renunció sin que se la pidieran, por la crisis judicial de la época y porque no necesitaba el trabajo porque planeaba irse a vivir a España en donde tenía ya un contrato de trabajo, pero no explicó cómo es que estando en 2018 nunca se fue y prefirió seguir en San Luis. En el mismo sentido que pretende darle al juicio la defensa de Freixes, habló contra Néstor y Cristina Kirchner, como una mafia que quería manejar San Luis interviniendo la justicia, lo que lo ubica claramente en la paranoia de sentirse perseguido y con antenas.
Este renunciante en blanco, no pudo explicar por qué presentó su renuncia sin una copia para reservarla, como se hace cualquier trámite personal. Allí negó tener amistad con Mario Zavala, algo que el ex viceministro de la Legalidad afirmó en una nota con nuestro medio. Zavala nos había dicho que eran muy amigos. ¿Quiso despegarlo? Asimismo admitió que había visitado a Zavala unos días antes de que venciera el plazo para elegir entre los ternados, pero en este caso fue para preguntar, según dijo, si lo iban a nombrar o no. Esto lo relató para justificar lo dicho por Gretel Diamante, quien había afirmado verlo junto a otros jueces nombrados en esos momentos, ingresar al edificio del Poder Ejecutivo. Lo raro de Spagnuolo es la pérdida de memoria selectiva que padece, mal común en varios testigos, puesto que no recordó cuándo presentó la renuncia, obviamente porque si lo decía admitía que la presentó antes de asumir, pero recordó hechos que tranquilamente podrían haber sido olvidados.
Otro de los puntos pocos creíbles de Spagnuolo, es que aseguró que por aquellas épocas convivía con Agúndez -otro renunciante en blanco-, pero no hablaban del tema de las renuncias. Esto no lo creyeron ni los defensores de los imputados quienes sonrieron cuando escucharon semejante disparate.
Gabriel Leonhardt
Uno que tuvo una declaración bastante poco creíble fue Gabriel Leonhardt, quien admitió que lo llamó Mario Zavala para pedirle que renunciara antes de haber asumido, siendo que es una barbaridad que un juez siga una orden de un funcionario del Ejecutivo, pero lo increíble es la forma del relato.
El hombre dijo haberse reunido con Zavala al ser nombrado, pero no quiso admitir que fue para firmar la renuncia sin fecha, y que luego recibió la llamada telefónica “de alguien que dijo ser Mario Zavala y que me pidió que renunciara”, sin reconocer la voz del otro lado del teléfono porque lo había visto una sola vez. En criollo, se podría traducir este testimonio mediante la gran pregunta ¿Cualquiera puede llamar a Leonhardt, hacerse pasar por un ministro, pedirle que renuncie y lo hace sin más?
En una cámara oculta que le hizo Gretel Diamante, Leonhardt había dicho que “ellos me dictaron la renuncia y me dijeron que la enviara así”, pero en el debate de ayer dijo que la había hecho en su casa y por propia decisión. Otra contradicción de este hoy magistrado poco creíble en cuanto a su independencia del Poder Ejecutivo, había dicho en declaración en Fiscalía que nadie le había pedido la renuncia, pero ayer en el debate cambió sin ponerse colorado, diciendo que se la pidió Zavala, pero se esforzó en aclarar que sin presión alguna, salvando al ex viceministro de la coacción.
Martha Vallica San Martín
Vallica San Martín fue otra ex magistrada -la echaron del Juzgado de Instrucción de Villa Mercedes mediante un Jury en 2011-, que no se puso ni colorada para admitir que firmó su renuncia sin fecha y antes de asumir como camarista. Dejó en claro que la gran mayoría de los magistrados de San Luis son sumisos ante el Poder Ejecutivo.
Vallica fue quien presentó dos renuncias, la segunda para negar que se la hubieran pedido por adelantado en aquella época, pero ayer no tuvo más remedio que señalar que fue llamada por Zavala y que cuando llegó le dijo que había que firmar la renuncia sin fecha si quería asumir como camarista. “Pensé que era un requisito”, dijo sin pensar un solo segundo que estaba ante un tribunal de magistrados de otra provincia, quienes la miraron con sorpresa, viendo el pésimo nivel de nuestros magistrados representados por Vallica.
Continuidad
Hoy se va a desarrollar la cuarta audiencia de este juicio que se le sigue a los entonces ministros de Legalidad, Sergio Freixes, y viceministro Mario Zavala, por las escandalosas renuncias anticipadas y sin fecha por parte de 11 magistrados en el año 2005 y que fue un papelón nacional para el Poder Judicial de San Luis.
Carlos Rubén Capella
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