La primera ministra británica Theresa May informó este jueves que su país, la Unión Europea (UE) y el Reino Unido estudian extender el período de transición del Brexit durante unos meses para garantizar que no haya una frontera en Irlanda.
«El período de tránsito, previsto desde el 29 de marzo de 2019 hasta finales de 2020, se prolongaría unos meses más para garantizar que no haya una frontera dura entre la región británica de Irlanda del Norte e Irlanda», expresó la funcionaria a medios de comunicación.
May agregó que Londres y Bruselas están trabajando para que no haya separación al final de la transición y que se mantenga la relación entre el Reino Unido y la Unión Europea.
Estas declaraciones surgen después que los jefes de Estado y sus socios de la UE constataran que no se han dado avances decisivos como para cerrar el acuerdo sobre el Brexit en octubre como se preveía, por lo que las negociaciones continuarán en las próximas semanas.
El acuerdo provisional alcanzado entre Londres y Bruselas, meses atrás, preveía un período de transición hasta el 31 de diciembre de 2020 y, para la primera ministra británica la posibilidad de extensión de unos meses más de la transición permitiría lograr mejores negociaciones.
A menos de seis meses que Bélgica abandone la UE, este país está procurando resolver el problema con lo que sería su única frontera terrestre, ya que para el 1 de enero de 2021 entraría en vigencia el tratado en el que se basará la nueva relación entre la Unión Europea y el Reino Unido como una entidad independiente del bloque europeo.