Las mismas fuerzas de seguridad que participaron de la represión en las inmediaciones del Congreso Nacional el jueves pasado, las policías de la Ciudad y Federal, más la Gendarmería, avanzaron desde la Plaza de los Dos Congresos por Avenida de Mayo hasta la 9 de Julio, donde continuaron persiguiendo con gases lacrimógenos y balas de goma a los manifestantes que intentaron llegar al Parlamento para repudiar la «reforma permanente» de la alianza gobernante.
Las corridas y los enfrenamientos se extendieron más allá del cruce de las avenidas de Mayo y 9 de Julio y llegaron casi a las puertas del Café Tortoni. La cacería se extendió a los bares aledaños, en uno de los cuales, en Avenida de Mayo y Luis Sáenz Peña, fue detenido Juan Gregorio Rodríguez, de 58 años, quien se refugió con sus tres hijas en el local ante el avance de las fuerzas represivas.
Alrededor de las 18 el saldo de los enfrentamientos era de 81 heridos, entre ellos 48 policías. Muchos de los detenidos son vecinos de la zona que abrieron las puertas de sus casas para asistir a los heridos.
Según datos del Ministerio de Salud de la Ciudad, fueron atendidas 60 personas, todas fuera de peligro, derivadas a los hospitales Ramos Mejía, Argerich, Penna, Durand, Santa Lucía, Churruca y Rivadavia por diversos traumatismos.