San Luis (LaNoticia) 15-11-16. También solicitó al tribunal que declare la nulidad de la pericia realizada por el bonaerense por graves irregularidades en el proceso.
La declaración dada en sede judicial por el teniente bonaerense Daniel Giles “fue bastante floja de papeles”, nos habían dicho al día siguiente de ocurrida y varios puntos flojos fueron reflejados por el defensor de Diego Lorenzetti -viudo de la asesinada Romina Aguilar-, Carlos Salomón, quien pidió que se declare la nulidad de todos los actos relacionados con la supuesta pericia que realizara Giles.
Para el penalista hubo manipulación de los teléfonos y violación de la cadena de preservación de la prueba, lo que obviamente da por tierra cualquier tipo de seguridad sobre los datos obtenidos y que además sean los que realmente se obtuvieron.
Otro de los temas que ataca es que Giles sea en realidad perito en telefonía celular, al señalar que eso es una “extrema falsedad”, toda vez que solamente tiene “un bachillerato en informática” y certificados de cursos no mayores a 48 horas de duración tomados en distintas provincias. No queda fuera de la atención de Salomón que el propio Giles afirmara que trabaja con un software oficial, lo que no está acreditado en el expediente y que el mismo es de su propiedad y lo está pagando en cuotas.
También de las declaraciones de Giles, Salomón desprende que el juez Cadelago Filippi le ocultó que el bonaerense iba a utilizar un determinado software, lo que le imposibilitó poder nombrar un perito de parte para controlar el trabajo de Giles.
Como si fuera poco, hay una irregularidad procesal muy importante en este tema que dejaría al juez Cadelago Filippi al borde del abismo, toda vez que Giles le hace entrega del material obtenido en la pericia al secretario Rodrigo Gallardo, sin la presencia del juez y sin notificación a Fiscalía ni a las defensas técnicas ni testigos hábiles que pudieran corroborar qué se entregaba y en qué condiciones. Esto, para Salomón, es una clara vulneración de la cadena de custodia de los elementos entregados por el funcionario policial.
Sobre la fallas en la cadena de custodia de los elementos entregados por el perito Giles, el penalista destaca que el sobre donde estaban depositados los DVD`s que entregó el perito, estaban abiertos cuando en realidad debieron abrirse delante de todas las partes, porque de lo contrario ¿Quién puede dar fe de que no hubo alteración de lo que había dentro del sobre? Como para `zafar´ de la situación, Cadelago Filippi le ordenó a Giles colocar un DVD en una PC y ante esto, se le pregunta si hay algún tipo de característica especial que indique que el DVD no fue violentado, ante lo que responde que el día y la hora en que se lo gravó, algo que no dejaría conforme ni al más inexperto en informática. Cuando se le consultó si había forma de modificar el contenido del DVD, el bonaerense respondió que desconoce si los hay, algo que deja mayor duda aún sobre que el contenido que haya en esos DVD´s no se haya podido modificar.
Tal como lo había adelantado nuestro medio, Giles realizó una pericia con un solo software al chips perteneciente al influyente Alberto Leyes, mientras que utilizó dos distintos con el chips de Diego Lorenzetti, lo que obviamente advierte que había una manifiesta predisposición de investigar más a Lorenzetti que a Leyes.
Cuando se lo consultó sobre este tema, de por qué había utilizado dos software para el de Lorenzetti y solo uno para el resto de chips, Giles se despachó con un “no me lo pidieron, quise una segunda opinión, un segundo programa, es prácticamente lo mismo que bajaron ambos programas”. Esto para Salomón demuestra una parcialidad manifiesta y aniquila el valor de la tarea de Giles, pero además le llamó poderosamente la atención la frase “no me lo pidieron”, cuando nadie le preguntó si se lo habían pedido o no, lo que significa que “lo traicionó su subconsciente”, según el penalista.
Finalmente, sobre los dichos de Giles respecto del chips perteneciente al celular del taxista que mencionó que al brasilero De Oliveira y al `Bocón´ Vilchez los había contratado el influyente Leyes, para Salomón, el juez Cadelago Filippi ya no tiene impedimentos para merituar lo declarado por el taxista Carlos Blatter y por ello planteó en un escrito por separado que se llame a prestar declaración indagatoria a Alberto Leyes.
En contexto
Romina Aguilar fue asesinada alrededor de las 06:40 del sábado 30 de enero, en la puerta de la casa 1 de la manzana 78 del barrio FAECAP, en el norte de la ciudad de San Luis, donde la mujer residía junto a su esposo e hijos.
En momentos en que la mujer acababa de sacar su camioneta Renault Duster para viajar a La Calera, donde cursaba el final de la escuela secundaria a través del programa Plan de Inclusión Educativo (PIE), fue sorprendida por dos jóvenes armados que iban en moto.
Los agresores la tomaron de la ropa, la arrastraron unos diez metros por el suelo, le dispararon dos balazos calibre .45, y escaparon en el mismo rodado en el que llegaron y sin robar nada, por lo que el robo como móvil del asesinato fue descartado de entrada.
Por el hecho, la justicia penal procesó al brasilero De Oliveira por haber confesado su participación luego de entregarse voluntariamente y ser sometido a indagatoria. Como De Oliveira en su indagatoria involucró a Lorenzetti como autor intelectual del hecho, la justicia procesó al intendente de La Calera.
Debido a esto, políticamente la Legislatura provincial suspendió a Lorenzetti en el cargo de intendente de La Calera.
Carlos Rubén Capella
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