Chile se convirtió en el séptimo país sudamericano que establece la unión civil para las parejas homosexuales luego de que el Senado de ese país aprobara el Acuerdo de Unión Civil (AUC) por lo que de esta forma el proyecto queda en condiciones para ser promulgado por la presidenta Michelle Bachelet.
El proyecto, que en principio se llamó Acuerdo de Vida en Pareja (AVP), tiene como objetivo mejorar las condiciones jurídicas y sociales de parejas de igual o distinto sexo sin estar casadas y fue aprobado por 25 votos a favor, 6 en contra y 3 abstenciones.
«La unión civil es una institución fundamental para aquellas parejas que hoy conviven sin estar casadas, se trata de un estatuto jurídico que no discrimina, que se aplica a todo tipo de parejas y lo más importante, que nos permite reconocer las distintas formas de familia y protegerlas a todas?, explicó el secretario general de Gobierno, Álvaro Elizalde.
En esta línea, la presidenta del Senado Isabel Allende expresó que «me siento muy orgullosa que hayamos dado este paso histórico, creo que hemos logrado avanzar en el respeto, en los derechos y en la dignidad de las personas, que es lo más importante,» «Nadie más será discriminado, sean parejas homosexuales, heterosexuales, que optan por una convivencia y que con esta legislación tienen plenamente garantizados sus derechos», dijo Allende.
En este contexto, el presidente del Movimiento de Integración y Liberación Homosexual (Movilh), Rolando Jiménez, celebró esta medida y señaló que “han pasado 11 años desde que ingresamos la primera ley de uniones civiles en el Congreso Nacional, queremos dedicar este triunfo a las familias homoparentales, a todas aquellas parejas heterosexuales que no quisieron casarse y que fueron estigmatizadas a lo largo de la historia».
«La unión civil es una institución fundamental para aquellas parejas que hoy conviven sin estar casadas»
El activista manifestó: “Estamos muy contentos y queremos agradecer a quienes han apoyado esta lucha, Chile hoy es un mejor país para vivir, este es el primer paso para la igualdad plena de la diversidad sexual, vamos a trabajar por matrimonio igualitario, por la ley de identidad de género».
Por su parte, el presidente de la Fundación Iguales, Luis Larraín, señaló que «es tremendamente emocionante para quienes hemos sentido la marginación, pasamos a ser parte del ordenamiento jurídico, pasamos de tener sólo deberes a tener derechos, este es un día histórico para nosotros».
El proyecto estable que el AUC es un contrato celebrado entre dos personas que comparten un hogar, con el propósito de regular los efectos jurídicos derivados de su vida afectiva en común.
Indica además que de carácter estable y permanente, las partes se denominarán convivientes civiles y serán considerados parientes para los efectos previstos en el artículo 42 del Código Civil. Sumado a lo anterior, se aprobó la indicación que refiere al cuidado de menores en caso de inhabilidad o imposibilidad de sus progenitores.
En este aspecto el proyecto deja en igualdad de condiciones tanto al cónyuge, al conviviente civil y a familiares al momento de obtener el cuidado del menor, y la decisión estará a cargo de un juez de familia, que deberá considerar el interés superior del niño.
La presidenta Bachelet concretó de esta forma una de las promesas que efectuó durante la campaña electoral que la llevó a la presidencia en marzo del año pasado. Argentina es, junto a Brasil y Uruguay, los tres únicos países sudamericanos que sancionaron leyes de Unión Civil y de Matrimonio Igualitario destinado a parejas del mismo sexo.