La oposición de Brasil solicitó este martes que el empresario Joesley Batista, uno de los dueños del grupo JBS, sea citado como testigo en la investigación contra el presidente de facto, Michel Temer, por corrupción.
La solicitud fue hecha durante la primera sesión de la Comisión de Constitución y Justicia de la Cámara baja que analiza la denuncia por corrupción pasiva contra Temer formulada por la Fiscalía.
La denuncia de la Fiscalía contra el presidente de facto se basa en los testimonios de Joesley Batista, quien entregó a la Justicia audios en los cuales el empresario relata ante un complaciente Temer maniobras ilegales para favorecer a su empresa ante ministerios y jueces.
Además, en uno de los audios Temer avala un soborno al expresidente de la Cámara de Diputados, Eduardo Cunha, para que no revelara detalles de la trama de corrupción de Petrobras.
Los audios fueron grabados por Batista durante una visita a Temer en la residencia oficial de la Presidencia, en marzo pasado.
El diputado Paulo Teixeira, del Partido de los Trabajadores (PT), aseveró que la comisión parlamentaria que analiza el caso de Temer debe escuchar a Batista y al fiscal general de la República, Rodrigo Janot, para «conocer todos los detalles» de las «gravísimas acusaciones» contra «el primer presidente brasileño acusado formalmente de corrupción».
Teixera indicó que los audios «son una prueba irrebatible» de la implicación de Temer en actos de corrupción, los cuales «solamente serán esclarecidos si se acepta la denuncia». De suceder esto, el mandato del presidente de facto será suspendido.