El papa Francisco desestimó esta semana la invitación cursada por el presidente no electo de Brasil, Michel Temer, para que visitara esa nación en ocasión del aniversario 300 de la aparición de la imagen de Nuestra Señora Aparecida.
De acuerdo con una información difundida por el portal brasileño Globo News, y atribuida al periodista Gerson Camarotti, el sumo pontífice alegó tener una agenda intensa, lo cual le impediría viajar a esta nación suramericana en octubre próximo.
“Sé bien que la crisis que enfrenta el país no es de simple solución, pero no puedo dejar de pensar en tantas personas, sobre todo en las más pobres”, expresó el papa.
No corresponde a la Iglesia ni al papa dar una receta concreta para resolver algo tan complejo, escribió el jefe de la Iglesia Católica.
El papa Francisco dijo que aunque no viaje “espiritualmente estoy con ustedes” mientras recibía la bandera y la camiseta de la selección brasileña, con la firma de los jugadores, obsequiada por el alcalde de Sao Paulo,Brasil, Joao Doria, durante un breve encuentro el 19 de abril en el Vaticano.
“Humildad es algo que no le falta al Papa (..) este Papa de los Papas (..) volver atrás es un gesto de grandeza (..) sería importante que nos visite, somos el país católico más importante del mundo, 130 millones de católicos” declaró Doria.