La Justicia brasileña ordenó este jueves el arresto de dos administradores financieros ligados al pago de al menos 40 millones de dólares en sobornos a políticos del Senado de Brasil, en la Operación Blackout, la nueva fase de investigación de la red de corrupción de Petrobras.
Los acusados fueron identificados como Jorge Luz y Bruno Luz, padre e hijo respectivamente, incluidos en la lista roja de la Organización Internacional de Policía Criminal (Interpol), ya que ambos residen en Estados Unidos (EE.UU.) y, además, tienen doble nacionalidad.
Los dos operadores sospechosos de intermediar en los pagos de sobornos a políticos brasileños están ligados al oficialista Partido del Movimiento Democrático de Brasil (PMDB), que lidera el mandatario brasileño, Michel Temer, quien llegó al poder mediante un golpe parlamentario contra la presidenta constitucional Dilma Rousseff.
El fiscal Diogo Castor de Mattos explicó en una rueda de prensa que Jorge Luz actuaba como “cabildero” en Petrobras desde la década de los 80 y habría distribuido 40 millones de dólares de forma irregular a directivos y “personas que aún están en el cargo gozando de foro privilegiado, senadores sobre todo y agentes políticos relacionados al Partido del PMDB”.
Los sospechosos, quienes según la Fiscalía utilizaban cuentas de empresas off shores en Suiza y en las Bahamas de forma irregular y disimulada para hacer el ingreso de las coimas a los agentes públicos, están acusados por delitos de corrupción, lavado de dinero, fraude en licitaciones y evasión de divisas.
Jorge Luz fue citado por el exdirector del área internacional de Petrobras, Nestor Cerveró, quien declaró ante la justicia que el expresidente del Senado Renán Calheiros recibió un soborno de seis millones de dólares por medio de Luz.
Se espera que los involucrados regresen a Brasil de forma espontánea o en caso contrario se iniciará un proceso de extradición.
Lava Jato (lavadero de autos), llamado así por el uso de negocios de autolavados para el blanqueo de dinero, es una de las mayores investigaciones de corrupción de la historia de Brasil que destapó una red de fraudes y delitos de la estatal brasileña Petrobras, así como un sinfín de problemas financieros y políticos.
Por Lava Jato se encuentran detenidos decenas de altos ejecutivos de empresas constructoras y se estima que entre 2004 y 2012, el dinero desviado asciende a 8.000 millones de dólares.