Se presentaron recursos de amparo contra los aumentos ante la justicia federal y ordinaria, y recomendaron a los usuarios impugnar las facturas con aumento para dilatar los plazos de vencimiento sin recibir punitorios o intereses.
Esta fue la reacción de las autoridades ante un malestar de la población que comenzó el fin de semana y que el lunes se tradujo en una campaña de junta de firmas contra los aumentos desmedidos de facturas, que comenzaron a recibirse principalmente en hoteles, restaurantes y comercios, y que la empresa Camuzzi adelantó que llegarán también para el sector residencial.
Gennuso se reunió con el titular de la Asociación Hotelera Gastronómica, Hugo de Barba, y su par de la Cámara de Comercio e Industria, Mariano Giménez, quienes expresaron su inquietud por los aumentos ante la llegada de la temporada turística invernal, que por el incremento de visitantes y las bajas temperaturas, los hoteles, restaurantes y comercios resultarán seriamente afectados.
Gennuso señaló que los aumentos que comenzaron a llegar son “irrazonables” e informó que la Municipalidad local presentaró este miércoles un recurso de amparo “en nombre de los 55.000 usuarios de Bariloche para exigir que se revea la decisión de las subas que llegan al 2.000 por ciento”.
La inquietud se extendió a los municipios y agrupaciones empresarias de Villa La Angostura, Dina Huapi, El Bolsón y Esquel, que se unirán en el reclamo para las gestiones ante la Nación y los recursos judiciales.
En El Bolsón la inquietud va en aumento y este miércoles se reunirán los jefes comunales de la Comarca Andina de Río Negro y Chubut, en tanto el intendente Bruno Pogliano instruyó la redacción de un recurso amparo, en defensa de los vecinos y también de la actividad turística.
En tanto, el jefe de Gabinete de Bariloche, Pablo Chamatrópulos, dijo que “el usuario tiene distintas opciones para enfrentar el problema mientras avanzan estas gestiones, como la posibilidad de impugnar la factura, para ganar tiempo postergando su vencimiento y evitando cualquier punitorio”.
También destacó que “el impacto en el costo domiciliario del gas es menor que en el comercial, porque tiene un incremento más chico y se mantienen los subsidios. No obstante igual será importante” y dijo que “si el usuario tiene un ahorro del 15 % en comparación con igual período anterior, el incremento será de la mitad”.
A estas acciones se sumó un recurso de amparo colectivo -al que los vecinos pueden adherir en lo sucesivo- presentado por el presidente de la Fundación Pensar en Río Negro, Sergio Capozzi.
Este recurso consigna también la inquietud por la eliminación de los subsidios, la falta de aviso previo y la preocupación de alojamientos turísticos pequeños y medianos, que pasan de pagar 500 pesos por bimestre a 30.000 o más por mes.
“A nadie escapa que las tarifas estaban atrasadas y que era necesario ajustarlas”, admite el redactor del recurso, pero señala el problema de un trabajador “que en el mejor de los casos verá reajustado su salario en el 30 %, para abonar incrementos de hasta 2.000 %”.
“Cómo va a hacer el empleador para mantener abierto su comercio, el cabañero para brindar el servicio si en temporada baja están recibiendo facturas por $ 6.000 cuando el mes pasado pagaban $ 320. ¿Cómo van a hacer las fábricas de chocolate que están estimado que en julio deberán pagar $ 500.000?”, señala entre otros argumentos.