El presidente francés confirmó ante el Parlamento que los ataques terroristas del viernes «fueron pensados en Siria, planificados en Bélgica y llevados a cabo con complicidad francesa» y aseguró que las 132 muertes «inocentes» fortalecieron «la determinación de ir contra el terrorismo», por lo que reivindicó el bombardeo ordenado el domingo. Hollande le pidió a los legisladores que acepten rápidamente la extensión del Estado de Emergencia y modifiquen leyes en materia de seguridad e información, como también dos artículos de la Constitución. «La lucha contra el ISIS nos movilizará por un largo tiempo», anticipó.
En un discurso ante los diputados y senadores franceses reunidos excepcionalmente en Versalles, Hollande sostuvo que los atentados estaban destinados a «causar el horror para dividirnos e impresionarnos», pero adelantó que Francia «intensificará sus operaciones en Siria» en respuesta a los atentados.
«Continuaremos esos ataques en las próximas semanas», insistió tras felicitar a las fuerzas aéreas por la misión ordenada el domingo, en la que diez bombarderos destruyeron un centro de informaciones del ISIS en Siria. Hollande precisó que el portaaviones «Charles de Gaulle» será trasladado el jueves al Mediterráneo oriental para triplicar la capacidad de Francia en la zona.
Además, Hollande informó que viajará a Estados Unidos y Rusia «en los próximos días» para hablar con los presidentes de esos países, Barack Obama y Vladimir Putin sobre el combate contra el Estado Islámico. «Lo que necesitamos es una acción común de todos los que combaten al terrorismo» y «Siria se ha convertido en la fábrica de terrorismo más grande del mundo».
«En Siria, buscamos incansablemente una solución política, en la que Bashar al Asad no puede constituir una salida, pero nuestro enemigo en Siria es el ISIS», dijo el mandatario.
Hollande pidió también convocar una sesión del Consejo de Seguridad de la ONU que culmine en una resolución que exprese la determinación de la comunidad internacional para combatir al EI. El objetivo «no debe ser contener, sino destruir al EI», insistió. Además, Hollande confirmó que la Cumbre del Clima no se mudará de Francia y en esa instancia cientos de mandatarios de todo el mundo «afirmará su lucha contra el terrorismo».
Según el presidente francés, los atentados supusieron también un ataque a los valores de Francia. «Son una agresión contra nuestro país, nuestros valores, nuestros jóvenes y nuestro estilo de vida», añadió. El mandatario francés calificó a Francia como «la madre patria de los derechos humanos» y sostuvo que los integrantes de ISIS «no pertenecen a la civilización». «Nuestra democracia ha superado a muchos enemigos peores que estos abominables asesinos», resaltó.
El jefe de Estado volvió a indicar que el país «está en guerra» y en ese contexto le solicitó a ambas cámaras del Parlamento prorrogar por tres meses el estado de emergencia en Francia y aprobar una reforma constitucional para luchar «contra el terrorismo».
«La necesidad de destruir» al grupo Estado Islámico «es un tema que concierne a toda la comunidad internacional», sostuvo Hollande ante los senadores y diputados franceses.