Benjamín, el niño de dos años cuyo cadáver fue hallado el lunes en un descampado de la localidad balnearia bonaerense de Ostende, fue asesinado a golpes en la nuca.
La autopsia practicada en la Asesoría Pericial de La Plata determinó que la muerte se produjo por «traumatismo en base de cráneo con pérdida de masa encefálica», mientras que las mutilaciones que sufrió el cuerpo fueron producidas «post mortem» por perros.
El cadáver de Benjamín fue hallado el lunes a la mañana en un descampado de dos manzanas ubicado en la esquina de Dante y Gaona, a tres cuadras de la ruta provincial 11 y a 25 del mar, en Ostende, partido de Pinamar.
Un hombre que pasó por el predio vio el cuerpo y se comunicó con la comisaría local, por lo que policías se trasladaron hasta el lugar y constataron que se trataba de un niño fallecido.