El presidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem, señaló que las nuevas condiciones planteadas por el gobierno griego para alcanzar un acuerdo económico son «una base sólida» para evitar el «default», que podría concretarse el próximo martes. Más temprano, Grecia había recibido una nueva ayuda del Banco Central Europeo (BCE), que volvió a aumentar la provisión urgente de liquidez.
Dijsselbloem, quien encabeza el grupo de ministros de Finanzas de la Eurozona, explicó que Atenas hizo llegar sus nuevas propuestas y los acreedores (UE y FMI) tuvieron por ello «muy poco tiempo» para analizarlas y presentarles un informe «completo y en profundidad». Por eso, indicó que deberá celebrarse un nuevo Eurogrupo esta misma semana, probablemente el miércoles o el jueves.
Por su parte, el comisario europeo de Asuntos Económicos, Pierre Moscovici, anticipó que las propuestas griegas son «una base sólida y global, aunque queda trabajo por hacer». «El acuerdo aún no está ahí», remachó.
Dijsselbloem añadió que, en su próxima reunión, el Eurogrupo podrá estudiar «el resultado final de las conversaciones (de los acreedores) con las autoridades griegas», que podrán comenzar «inmediatamente, esta misma tarde».
«Las instituciones se pondrán a trabajar de inmediato con las autoridades griegas, para estudiar todo esto, con vistas a un próximo acuerdo», confirmó Moscovici.
Los ministros concluyeron su reunión, que duró menos de una hora y media, antes de una cumbre de líderes de la Eurozona en Bruselas. La cumbre se presentó inicialmente como la ocasión de alcanzar al fin un acuerdo con Grecia, pero finalmente no se espera de ella más que «un impulso político» de parte de los dirigentes de la unión monetaria.
Según trascendió, Atenas estaría dispuesta a hacer concesiones e incrementar los impuestos de algunos productos o los hoteles para aumentar los ingresos y eliminar las jubilaciones anticipadas a partir del próximo año, así como reducir las pensiones complementarias más elevadas de algunos funcionarios.
Grecia ha propuesto reducir las pensiones en 0,4 por ciento del producto interior bruto (PIB) en 2015 y en 1 por ciento desde 2016, informó la agencia Dow Jones.
En tanto, el consejo de gobierno del BCE decidió ampliar el máximo de liquidez que pueden pedir prestado los bancos griegos con carácter de urgencia. La semana pasada la cantidad se situaba en 84.100 millones de euros y el viernes el Banco de Grecia solicitó un aumento de 3.000 millones de euros.
Grecia debe devolver al Fondo Monetario Internacional (FMI) 1.600 millones de euros el 30 junio, cuando venza la actual prórroga del rescate.