«A Cristina hay que meterla presa». La sentencia fue pronunciada por el presidente Mauricio Macri en una reunión privada en Barrio Parque con el empresario Cristóbal López en la mañana en la que se realizaba la primera vuelta electoral de 2015.
López se negó a prestar su canal C5N para avanzar en esa persecución y poco después se le «declaró la guerra» y recibió varias «apretadas» por parte del operador judicial del macrismo, Fabián «Pepín» Rodríguez Simón, que terminaron con él y su socio Fabían de Sousa detenidos hasta la semana pasada .
Esa es la versión de la historia que contó López ante la jueza federal María Servini como testigo en la causa por espionaje contra los integrantes del Grupo Indalo que presentó su socio, Fabián De Sousa.
En su declaración testimonial, López dijo que aquella mañana, en la casa de Franco Macri en Barrio Parque, negó que su grupo de medios tuviese relación directa con la ex presidenta Cristina Kirchner y adelantó que frente a una eventual gestión de Macri se mantendrían como «un canal neutral», a pesar de reconocer su simpatía por la gestión kirchnerista.
«No contés conmigo», le respondió López a Macri, ante su pedido de colaboración para meter presa a Cristina. Tras su negativa comenzaron las «apretadas» por parte de Rodríguez Simón. «Ustedes ganaban mucho los últimos años, ahora van a estar 4 años sin ganar nada», fue una de las advertencias del operador judicial del macrismo, según quedó asentado en la causa que investiga Servini.
Desde entonces, López señaló que el macrismo le «declaró la guerra» y «Macri nos tiró el Estado encima» y abrió la investigación de la AFIP por una supuesta deuda de 8 mil millones de pesos por parte de Oil Combustibles, empresa también controlada por López y De Sousa.
El empresario sostuvo que inclusive funcionarios del macrismo intervinieron en su intento de vender el grupo de medios a Orlando Terranova, propietario de la empresa de publicidad Sarmiento. «No, Orly, no nos interesa que López pague, políticamente el negocio es otro. Para nosotros lo mejor es que quiebre y poder exhibirlo en la Plaza de Mayo», le dijo el ex coordinador del gabinete económico de Macri, Mario Quintana, al empresario mendocino, según declaró López.
El diálogo con Macri
A las 11 de la mañana del 25 de octubre de 2015, mientras los argentinos votaban en la primera vuelta electoral, el candidato a presidente Mauricio Macri llegó en una camioneta Hyunday gris, junto con su secretario y custodios privados, a la casa de Barrio Parque, propiedad de Franco Macri. Ese fue el contexto descripto por López acerca de la reunión privada que mantuvo con Macri, a partir de la cual comenzaron las presiones en su contra.
En su declaración López relató el siguiente diálogo:
—Necesito el canal para ir por Cristina—, le pidió Macri a López
—¿Qué es ir por Cristina?
—Meterla presa.
—No contés conmigo. Yo no soy amigo de Cristina, pero la aprecio y creo en el proyecto político del kirchnerismo.
Según la declaración del empresario, en ese momento, Macri le sugirió que era Cristina la que manejaba el canal C5N.
—Pará, pará que yo no soy palo blanco de nadie.
—¿Qué es eso?
—No soy testaferro de nadie, todo lo que tengo es mío. El canal es 70 por ciento mío y 30 por ciento de Fabián De Sousa, así que ese cuento que anda por la calle diciendo que el canal es de Cristina, sacátelo de la cabeza porque no es cierto.
—¿Qué vas a hacer después del 10 de diciembre?— insistió Macri
—Nosotros no vamos a ser oposición. Nuestro canal va a ser un canal neutral.
Tras describir ese ida y vuelta con el entonces candidato a presidente, López señaló que se quedó «nervioso» y que «a partir de ahí no sé que hablamos, no lo recuerdo». «Él no se mostró molesto ni nada, todo lo que me dijo fue con naturalidad, como si hubiésemos hablado de arreglar una cena», describió el empresario.
La declaración testimonial quedó registrada en la causa que Servini lleva adelante a partir de la denuncia de De Sousa contra Macri y funcionarios de su gobierno, entre ellos, Quintana, Rodríguez Simón y el ex titular de la AFIP Alberto Abad y su sucesor, Leandro Cuccioli, entre otros.
Las «apretadas» de Simón
Tras aquel encuentro privado con Macri, el candidato de Cambiemos llegó a segunda vuelta y ganó el ballattoge en noviembre. López indicó que las reuniones pasaron a ser con el «amigo del alma» del presidente, Nicolás Caputo, y el operador judicial Rodríguez Simón.
López precisó que en enero de 2016 uno de los encuentros con Simón fue por el negocio del juego en la Ciudad, el casino flotante y el Hipódromo de Palermo. «Yo soy Macri», fue la presentación de Simón, según el relato del empresario, y le advirtió: «Macri decidió que tienen que pagar más impuestos o más canon».
En su declaración, López citó una frase de Simón para marcar el tono de los encuentros: «Ustedes ganaban mucho los últimos años, ahora van a estar 4 años sin ganar nada» o «ustedes hicieron durante 12 años lo que se les dio la gana, ahora nos toca a nosotros».
Según el empresario, sus negocios en los medios de comunicación estaban afectando su relación en otras áreas y, en particular, con sus socios en el Hipódromo de Palermo que le echaban en cara que «lo que estaba haciendo Macri era rompernos el negocio, motivado por la línea editorial de C5N».
«La sensación que tenía en esas reuniones nunca las tuve en reuniones de negocios», declaró el empresario ante Servini. «Empezó la guerra», lo condenó «Pepín» Rodríguez en uno de los encuentros.
La causa Oil combustibles
López señaló en su declaración testimonial que hasta ese momento no comprendió de qué se trataba la declaración de guerra, pero a los pocos días —el 13 de mayo de 2016— leyó la denuncia por la deuda de Oil Combustibles con la AFIP en el diario La Nación y por la noche Macri ofreció una entrevista a Luis Majul en la que adelantó que iban a embargar todas las cuentas del grupo. «Esa fue la declaración de guerra», sostuvo el empresario en su declaración, y remarcó: «Macri nos tiró el Estado encima».
López volcó en su declaración detalles que ya había difundido tras su primera liberación, entre ellos que fue su amigo Daniel Mautone, socio del presidente de Boca y operador judicial Daniel Angelici, quien le adelantó que lo iban a detener.
Según relató en Tribunales, en junio de 2017, con la certeza de que iría preso, López decidió vender parte de su participación en el grupo empresario y vender el conglomerado de medios a Orly Terranova, ex candidato del PRO en Mendoza y cercano a Macri y Caputo. La operación estuvo a punto de concretarse pero al final, en octubre de ese mismo año, la transacción se derrumbó.
López declaró que el motivo de la frustrada operación fue una conversación entre Terranova y Quintana. El ex vicejefe de Gabinete de Macri le habría aclarado al corredor el verdadero propósito de las maniobras contra Indalo: «No, Orly, no nos interesa que López pague, políticamente el negocio es otro. Para nosotros lo mejor es que quiebre y poder exhibirlo en la Plaza de Mayo».