Luego del descongelamiento autorizado por el gobierno , las petroleras actualizaron este jueves los precios de sus combustibles un 4 por ciento. Es la quinta suba que aplican las empresas en lo que va del año, luego de una leve baja introducida a comienzos de enero. En lo que va del año, el incremento oscila entre el 20 y el 24 por ciento, según el combustible y la empresa.
En la Ciudad de Buenos Aires, la petrolera YPF, que concentra el 55 por ciento del mercado, aumentó la nafta súper de 43,71 a 45,49 pesos (4 por ciento) y la premium de 50,43 a 52,49 pesos (4,1 por ciento), mientras que el gasoil común lo ajustó de 40,94 a 42,59 pesos (4 por ciento) y el premium de 47,92 a 49,84 pesos (4 por ciento). En el año, YPF incrementó 22 por ciento su nafta súper, 21 por ciento la nafta premium, 22,2 por ciento el gasoil común y 21,9 por ciento en gasoil premium.
La brasileña Raízen, que controla las estaciones de servicio de la marca Shell informó, por su parte, que subió la nafta súper de 43,91 a 45,67 pesos (4 por ciento), la premium de 50,93 a 52,97 pesos (4 por ciento), el gasoil común de 42,96 a 44,69 pesos (4 por ciento) y el gasoil premium de 48,92 a 50,84 pesos (3,9 por ciento). En el año, Raizen su nafta común un 20,2 por ciento, la premium un 20,4, el gasoil común 24,4 y el gasoil premium un 21,1 por ciento.
A su vez, Axion, la marca que le disputa el segundo lugar a Shell, informó que en la Ciudad de Buenos Aires la nafta súper trepó de 43,89 a 45,64 (4 por ciento), la premium de 50,89 a 52,89 pesos (4 por ciento), el gasoil común de 42,14 a 43,82 pesos (4 por ciento) y el gasoil premium de 48,72 a 50,66 pesos (4 por ciento). En lo que va del año, el aumento acumulado en las estaciones de la Ciudad de Axion es de 20,3 por ciento en naftas, tanto súper como premium; de 21,8 por ciento en gasoil común y de 20,7 por ciento en gasoil premium.
Hacienda justificó la marcha atrás con el congelamiento a raíz de la “volatilidad internacional del precio del petróleo”. En un comunicado aseguró que el ataque que sufrió Arabia Saudita forzó a una revisión de la medida ya que el precio del Brent se disparó 14 por ciento el lunes. “Estos acontecimientos conllevan a una situación imprevista y significativa de incremento de precios que inevitablemente impactan en la producción, la comercialización y el normal abastecimiento de los combustibles en nuestro país”, dice el texto. Sin embargo, lo que no aclaró la cartera que conduce Hernán Lacunza es que esa suba inicial de 14 por ciento que había llevado el crudo a 69 dólares, se revirtió sustancialmente y este miércoles cerró a 63,60 dólares, apenas un 5,6 por ciento por encima del lunes. Incluso en lo que va del año el crudo Brent trepó 18,2 por ciento, por debajo del ajuste que se aplicó a las naftas. El problema es que en el mismo período el dólar se disparó un 52 por ciento, situación que dejó retrasados los precios de las naftas con respecto a la paridad de importación aún después del aumento autorizado este miércoles.