La Central Unitaria de Trabajadores/as (CUT) de Chile cumple este miércoles 31 años de fundada en un escenario nacional de reformas antisindicales impulsadas por el Gobierno de Sebastián Piñera.
La CUT convocó a una jornada de acción sindical a la que se sumó la Unión Nacional de Empleados de Chile, así como otras organizaciones, para apoyar la propuesta de la diputada Camila Vallejo de reducir la jornada laboral de 45 a 40 horas semanales.
Mientras tanto, el Ejecutivo continúa la presión para que no se apruebe esta propuesta, que cuenta con un respaldo de más del 70 por ciento de la población.
Las organizaciones sindicales han denunciado una campaña mediática, la cual pretende transmitir que la reducción de la jornada semanal provocaría un aumento de los costos laborales y, consecuentemente, desaparecerían unos 250.000 empleos.
Por su parte, el presidente Piñera ha defendido su posición y dado la espalda a la propuesta sindical, mientras insiste en buscar la “flexibilidad» de horarios por acuerdo entre empleados y empresarios.
Pese a las declaraciones gubernamentales sobre los afectados por la medida, la Confederación Gremial Nacional Unida de la Mediana, Pequeña, Microempresa, Servicios y Artesanado apoyó la aprobación de la jornada laboral de 40 horas.