El sujeto contaba con orden de aprehensión debido a que había sido señalado por otro de los detenidos en octubre de participar en las agresiones contra los estudiantes normalistas.
Funcionarios de la Policía Federal de México detuvieron este sábado a otro presunto implicado en el caso de los 43 estudiantes normalistas desaparecidos desde el 27 de septiembre de 2014 en Iguala, estado de Guerrero, al sur del país.
En un comunicado, la Comisión Nacional de Seguridad (CNS) de México informó que el detenido fue identificado como Miguel Ángel Landa Bahena, señalado además como presunto integrante del círculo cercano a Gildardo López Astudillo, prófugo de la justicia y jefe de una agrupación delincuencial en Guerrero.
El detenido contaba con una orden de aprehensión, la cual fue cumplimentada por la Policía Federal en la Delegación Gustavo A. Madero, en el Distrito Federal de México. Landa Bahena es señalado como uno de los responsables de las agresiones contra los estudiantes normalistas por parte de los cuatro detenidos en el mes de octubre de 2014 y una más detenida en noviembre de ese mismo año.
En contexto
Tres hombres de la banda criminal Guerreros Unidos fueron capturados y confesaron el asesinato de los 43 normalistas.
El Procurador General de República (PGR) de México, Jesús Murillo Karam, informó sobre la detención y dijo que los autores materiales llevaron los cuerpos de los estudiantes al basurero de Cocula donde los quemaron, informó Murillo.
«Quemaron no solo los cuerpos con ropa sino que quemaron la ropa de quienes participaron pos instrucciones, hubo todo un intento de borrar cuanta pista había», señaló con respecto a los cuerpos calcinados en el basurero de Cocula.
De esta organización cumplieron funciones “El Gil” quien reportaba y recibía órdenes de Sidronio Casarrubias Salgado, líder de Guerreros Unidos, quien permanece en un penal federal.
“El Chucky” organizó el ataque y secuestro de los estudiantes, coordinado con el secretario de Seguridad de Iguala, Felipe Flores, quien todavía está prófugo. “El Huasaco” suministró el diesel y la gasolina para quemar los cuerpos y “El Terco” dio la orden de desaparecer los restos de ceniza y huesos.
Fuente TeleSUR