A casi tres meses de la desaparición del submarino el Presidente recibió en la Casa Rosada a los parientes de los 44 marinos. El Gobierno accedió al pedido de mantener el operativo en busca del buque y pagará una recompensa de unos cuatro millones de dólares a quien lo encuentre.
El Salón Norte de la Casa Rosada fue el escenario en el que se concretó el cara a cara de Mauricio Macri con los familiares de la tripulación del ARA San Juan, quienes reclamaron que no se detenga la búsqueda del submarino. El Presidente accedió a ese pedido y el Gobierno dispondrá una recompensa de varios millones de dólares para quien encuentre el submarino perdido desde el 15 de noviembre último.
La reunión comenzó pasadas las dos de la tarde. Participó un familiar por cada uno de los 44 tripulantes. Al Presidente lo acompañaron la vicepresidenta Gabriela Michetti; el secretario general de la presidencia, Fernando de Andreis; el ministro de Defensa, Oscar Aguad; y el comandante de la Armada, José Luis Villán. El encuentro duró una hora, tal como estaba pautado.
Los familiares entregaron un petitorio en el que piden la ampliación del área de búsqueda en el Atlántico Sur y que haya más presupuesto, así como “convocar a la Prefectura Naval Argentina” y a buques pesqueros “con la tecnología adecuada”.
Macri prometió seguir con la operación de búsqueda y les anunció que se ofrecerá una recompensa internacional. Así lo confirmó Aguad a la salida del encuentro, quien estimó que «el próximo lunes va a publicarse una resolución administrativa». Era un punto que también figura en el petitorio entregado. La cifra de cuatro millones es el “importe máximo que nos ha solicotado” una de las empresas de búsqueda submarina que podría contratarse desde el Estado, según los familiares, que contactaron a tres firmas del ramo.
Asimismo, también reclamaron que participe el Inidep (Instituto Nacional de Desarrollo Pesquero), a través del buque oceanográfico Víctor Angelescu, “el cual demostró sobradas aptitudes para la búsqueda que necesitamos”. Y que se contrate «directamente sin pasar por procesos licitatorios a la empresa que usted considere más apta e idónea para la búsqueda submarina, las familias hemos contactado a tres, pero lo importante es materializarlo cuanto antes».
Macri se había reunido con un grupo de familiares cinco días después que se perdiese contacto con el ARA San Juan. Fue el 20 de noviembre, en la Base Naval de Mar del Plata. El Presidente se acercó en el marco de un descanso en la residencia de Chapadmalal. Desde entonces, los familiares tuvieron contactos con Aguad, quien calificó la reunión de ayer como “constructiva”.
«Hubo un gran compromiso del Presidente con la investigación. Queremos saber qué pasó, si hubo corrupción en el arreglo del barco, si hubo negligencia. Y si fue un accidente también queremos saberlo. Mucho ayudaría encontrar al submarino para saber esto», estimó el ministro de Defensa, que había sido increpado por los familiares en los encuentros sostenidos en Mar del Plata.
Los familiares salieron con el convencimiento de que no debe haber homenajes del Gobierno hasta tanto se sepa qué ocurrió. «No vamos a permitir un reconocimiento hasta no saber realmente qué sucedió, y preferimos que ese gesto se traduzca en más recursos para sumar medios a la búsqueda», afirmaron. Luis Tagliapietra, padre de uno de los tripulantes, había dicho, horas antes de ir a la Rosada, que esperaban “respuestas concretas” y recalcado que “el ARA San Juan no estaba en condiciones para realizar la misión que le encargaron.»
Tras el encuentro, hubo una audiencia de los familiares con la ministra de Desarrollo Social, Carolina Stanley, para tratar la cuestión de las becas de estudio para hijos de los tripulantes, algo a lo que el gobierno se había comprometido.