La suba será del 6 al 10 por ciento. Es la segunda que aplicarán las petroleras desde que el ministro de Energía, Juan José Aranguren, anunció la desregulación del sector y la cuarta del año. Desde las estaciones de servicio anticiparon que entrará en vigencia entre hoy y pasado. El incremento acumulado en lo que va de 2017 sumará un 40 por ciento, 16 puntos por encima de la inflación anual.
A un mes del triunfo del oficialismo en las elecciones legislativas y a dos meses de la desregulación del mercado de combustibles, las petroleras aumentarán por segunda vez la nafta. Así lo anunciaron los estacioneros, que estimaron que la suba será de entre un 6 y un 10 por ciento a partir del jueves. El incremento será el cuarto en lo que va del año, acumulará casi un 40 por ciento en once meses y rondará los 16 puntos por encima de la inflación anual.
El argumento que esgrimieron los titulares de las estaciones de servicio es que la decisión de aumentar es producto de la suba en el precio internacional del petróleo, del ajuste del peso con el dólar en un mercado liberado y de las variaciones en el valor de los biocombustibles.
El titular de la Asociación de Estaciones de Servicios Independientes, Manuel García, explicó que el precio del petróleo crudo Brent, “que es el que tienen en cuenta las petroleras argentinas” y que “define el 80 por ciento del cuadro tarifario local”, trepó a los 63,5 dólares. “A esto hay que sumarle el aumento de los biocombustibles y la cotización del dólar, que subió desde el último aumento de las naftas y que forma el restante 20 por ciento», sintetizó.
El último aumento de combustibles fue de hasta un 12 por ciento y entró en vigencia el 23 de octubre, horas después de los comicios legislativos en los que el oficialismo se alzó con el triunfo en la mayoría de los distritos del país. Un mes antes de esa fecha, el ministro de Energía y ex presidente de Shell, Juan José Aranguren, había anunciado que el Gobierno dejaría de regular los combustibles y que, por lo tanto, el precio sería producto de los vaivenes de la “mano invisible” del mercado.
Durante ese anuncio, el funcionario había vaticinado que el reacomodamiento automático del valor de las naftas llevaría el precio a la baja. Sin embargo, en el último mes se elevaron las variables de los precios internacionales del crudo y ello impactó en los surtidores.
La nueva suba de los combustibles será la cuarta en lo que va de 2017. El primer incremento fue del 8 por ciento aplicado en enero, mientras que el segundo fue en julio, de entre 7 y 8. En este período, con el precio regulado por el Estado, la única baja registrada en los precios fue en abril: 0,1 por ciento.
El tercer incremento, ya con el mercado liberado, fue aplicado en octubre y rondó al 12. Con esta cifra, la suba anual trepó, en algunos casos, al 29 por ciento, 12 puntos por encima de la inflación oficial hasta entonces.
Ahora, con la suba de hasta el 10 por ciento previsto para mañana, la suba interanual giraría en torno del 39 por ciento, es decir 16 puntos por encima de la inflación hasta octubre, mes en el cual la Argentina se convirtió en el segundo país con los combustibles más caros de América Latina.